TERMOMETRO PIC GALIO-69

El termómetro médico dispone de una cobertura hermética e higiénica de cristal y puede desinfectarse ilimitadamente.

La temperatura de la solución de limpieza y desinfección no debe sobrepasar los 42 °C.

La limpieza del termómetro de cristal antes y tras el uso puede llevarse a cabo con agua jabonosa fría.

Desinfecte el termómetro con un algodoncito o pañito humedecido en alcohol o bien moje o sumerja el termómetro en una solución desinfectante (obsérvese las indicaciones del fabricante de agente desinfectante con vistas a la duración

necesaria para que surta efecto o duración de sumersión).

En caso de rotura del termómetro, puede colectarse el líquido vertido por medio de un pincel, pañuelo o paño de celulosa humedecido en lejía jabonosa. Los restos pueden eliminarse en la basura doméstica.

Termómetro clínico libre de mercurio: no contamina el medio ambiente, fácil de usar y leer.

Con lente de aumento para una lectura más cómoda de los resultados y muy fácil de bajar la temperatura gracias a un soporte especial.

Contiene galio, indio y estaño, no tóxico ni dañino con el medio ambiente.

Mide la temperatura comprendida en el intervalo de 35.5 °C a 42.0 °C.

Marcado CE. ON: 0197. Clase IIa.

Antes de comenzar la medición, asegúrese de que el valor indicado en la columna amarilla sea inferior a 36 °C.

Posicione el termómetro en el cuerpo según el tipo de medición deseado (axilar, rectal, oral).

Después de aproximadamente 4 minutos, el termómetro mide la temperatura corporal y será posible leerla. La lectura de la temperatura puede facilitarse girando levemente el termómetro.

Después de la medición, el líquido indicador debe regresar a menos de 36 °C. Para tal fin, introduzca el termómetro en el soporte correspondiente presente en el estuche, asegurándose de empujarlo bien hasta el fondo, haciendo pasar la sonda a través del respectivo orificio. Sucesivamente, empuñe el soporte y realice movimientos veloces y rítmicos para hacer que el líquido quede por debajo de la primera marca numerada.

Al concluir la operación, retraiga CUIDADOSAMENTE el termómetro al centro del soporte y asegúrese de que la sonda quede completamente dentro de este para evitar roturas accidentales. Se recomienda, además, prestar atención, al

manipular el termómetro mientras se encuentra en su estuche, a que la sonda no quede expuesta.

Limpie el termómetro de vidrio antes y después del uso; observe las "Advertencias para la limpieza".

NOTA: esterilice siempre el termómetro antes y después del uso. En los hospitales la esterilización debe ser estar a cargo exclusivamente de personal experto.

No permita que el termómetro se caiga ni lo someta a golpes violentos.

No doble ni muerda el extremo del termómetro.

Guárdelo fuera del alcance de los niños.

El termómetro no debe emplearse si la cobertura de cristal se encontrara dañada (peligro de herirse).

Al emplearse con niños, debe encontrarse presente un adulto en todo momento.

El líquido de medición galinstano no debe entrar en contacto con metales preciosos o ligeros, ya que el galinstano reacciona con estos metales.

Por favor, utilícese con toda diligencia durante la medición a fin de evitar el peligro de herirse.

El empleo del termómetro no lo exime de visitar al médico. Si la fiebre permanece, ha de ser tratada por el médico, sobre todo en el caso de los niños.